La base de todo como ya había dicho es la tolerancia. Y ahora no solo pienso en mi terreno, sino en todos los terrenos donde la tolerancia pueda resultar momento clave. Debemos comprender y respetar la vida, la forma de ser,las costumbres y los sentimientos de todos. No juzgar a nadie sin una causa razonable. No odiar a nadie por inercia. No odiar a nadie por sus ideologías, por su religión, por su nacionalidad, por su color de piel, por sus discapacidades, por sus dependencias (que sabemos muy bien que las dependencias son también una enfermedad), por su estructura corporal, por su identidad sexual. Por nada de estas cosas hasta el momento que nos hagan mal, sean deshonestos, desagradables, rudos con nosotros, o que nos hagan daño. A quién le importa que algien sea judío, gitano, gay, discapacitado, obeso hasta el momento que se metan con nosotros o que nos hagan daño? Por qué odiamos a estas personas? Por inercia. Por el hecho de que la sociedad actual nos lo exija. Con qué derecho? Tomemos el ejemplo de los gays. Con qué derecho decidimos nosotros de cómo "deben" ellos ser felices? Por qué los odiamos? Son personas, igual que nosotros. Qué más te da si estas personas no son felices de la manera que conocemos nosotros? Manera "correcta" para ser feliz? Esto no existe. Existe manera para ser feliz. Así tal cual. Si la felicidad la encontramos siendo homosexuales? Genial. Si siendo heterosexuales? Genial. Respetemos las ideologías de los de más! (mutuamente, claro está. Así que un homosexual también respete a los heteros) El hecho de ser gay les quita los buenos sentimientos a las personas? No. Uno de mis mejores amigos es homosexual y es el tío con los sentimientos más maravillosos que he visto nunca. Es un amigo con el que siempre puedes contar (incluso si él está pasando por momentos difíciles) Tiene corazón tan grande que me emociono cada vez que haga algo por mí. Sin embargo es victima de muchísimas humillaciones. Por qué? Porque es feliz de manera diferente que los demás.
Otro ejemplo: mi futuro cuñado es judío. Y tengo familiares a los que no podemos decir que lo es porque tienen un odio tan profundo contra los judíos que este hecho produciría conflictos internos muy graves. Solo porque esa persona piensa que los judíos mienten, que no hubo holocausto, que los judíos solo piensan en negocios y que no tienen sentimientos. Una estupidez como una casa. Los judíos son personas iguales a nosotros con ideologías religiosas diferentes. Esa es razón para odiarles de esa manera y para negar el capítulo más grave y más doloroso de la historia: el holocausto?
Pasa lo mismo con los gitanos aunque allí sí hay personas que merecen que seamos cuidadosos con ellos. Pero no por ser gitanos. Sino porque dentro de su nación hay otras normas las que no coinciden con las nuestras. Para ellos todo es de todos. Así que si te quitan algo, para ellos no es robar sino es compartir. Pero para un húngaro (o cualquier otra nación que no sea la de los gitanos) es robar evidentemente. Hay muchos que no trabajan porque no quieren y hacen la cola todo el día por subsidios. Sin embargo tengo amigos gitanos que son honestos, amables y trabajadores. No debemos odiarles solo porque son gitanos. Siempre hay que tener en cuenta lo que ya he dicho tantas veces: mientras no se metan con nosotros, sean honestos, amables, nos respeten, NO odiemos a nadie. Y por supuesto que se trata también de los discapacitados. Allí con menos derecho podemos despreciar o juzgar a la persona discapacitada y mucho menos podemos burlarnos de ella. Por qué? Porque un día podemos encontrarnos en la misma situación sea por accidente o por alguna enfermedad.
Por último quiero destacar lo importante que es compartir las cosas (sean buenas o malas) con las personas íntimas de nuestro alredededor. Lo importante que es no ignorar sus problemas o no envidiarlos cuando estén pasando por buenos momentos o cuando estén felices. Lo importante que es tener la capacidad de compadecer o de poder compartir la felicidad de los demás. En eso se basa el verdadero respeto hacia los demás.
Este post no pretende ser el discursillo moralista de la semana. Pero sí pretende intentar a entrar en razón a todos. Que la gente se pare y piense bien. No juzgues y no serás juzgado. Antes de sentir asco por alguien solo porque lo sientes diferente de ti, ponte sus zapatos. Cuando recorras su camino ya podrás formar el derecho de exigirle cómo debe ser, cómo debe sentir, cómo debe vivir la vida.
